Entre los sectores activos, se encuentran principalmente la industria manufacturera y el comercio de consumos esenciales, la actividad agropecuaria y los servicios sociales y de salud.
El informe puntualizó que, entre los sectores inactivos, se destacan la construcción, servicios varios y hoteles y restaurantes, además del segmento fabril y comercial que no contempla productos esenciales.
En ese escenario, el 45% de las empresas están operativas en virtud de ser consideradas actividades esenciales, proporción que equivale en torno a 267.000 compañías.
El trabajo subrayó que, de ese total, alrededor de un tercio opera con dotación mínima, “de modo que sólo el 31% de las firmas están en condiciones plenas, cerca de 185.000”.
Remarcó que “el 19% de las firmas (114.000), a priori, podría realizar sus actividades a través del teletrabajo, aunque no puede confirmarse si efectivamente lo está haciendo”.
“Debe tenerse presente que muchas proveen a sectores que hoy están inactivos”, indicó el análisis.
Así, la Fundación Mediterránea apuntó: “Tanto las inactivas como las que no pueden realizar sus actividades con normalidad representan más de 332.000 empresas, cifra que podría engrosarse a más de 410.000 si se considera también a las que sólo pueden operar con dotaciones mínimas”.
“En lo que respecta al empleo implicado, el 44,4% de los ocupados formales se encuentra en actividades que están operativas en virtud de ser consideradas esenciales (2,85 millones de puestos); al tiempo sólo 32,8% de los trabajadores (2,1 millones de trabajadores) está plenamente operativo en actividades esenciales”, manifestó el informe.
A su vez, el 39,6% de los trabajadores formales “se encuentra en actividades inactivas por imposibilidad de funcionar y existe un 16% de empleos formales en actividades con posibilidades de realizar trabajo a distancia”.