El veto de la Casa Rosada al “Plan V” demora la definición del candidato peronista a la gobernación bonaerense. Martín Insaurralde y Malena Massa no consuman su fórmula para evitar chocar con María Eugenia Vidal, parálisis que hace emerger el “Plan B” de Unidad Ciudadana: Axel Kicillof-Verónica Magario.
En esa sintonía, Mauricio Macri volvió ayer al conurbado junto a Vidal y Horacio Rodríguez Larreta, la santísima Trinidad PRO. Fue al día siguiente de que la gobernadora se atornillara a la provincia y confirmara, una vez más, que buscará la reelección en su cargo.
La caída de la imagen presidencial en medio de la crisis social y económica obliga a la Casa Rosada a pegar a Macri con figuras como Vidal y Larreta que conservan un mejor índice de aprobación en sus distritos. Sólo en la provincia de Buenos Aires, el ticket presidencial de Cambiemos mide 7 puntos menos que la intención de voto que cosecha la gobernadora.
En Lanús, junto al intendente macrista Néstor Grindetti, el Presidente subrayó la importancia de fortalecer la cultura del trabajo en la Argentina, al recorrer las instalaciones del Centro de Monitoreo del partido del sur bonaerense donde saludó a un grupo de empleados que se desempeñan en el SAME.
En modo campaña, y en su segunda incursión de la semana en territorio bonaerense, Macri aseguró que el trabajo “nos hace sentir protagonistas y da la oportunidad de demostrar que somos capaces de hacer nuestro aporte” al resto de los argentinos “para construir un futuro mejor para todos”. Y destacó que los que cumplen cotidianamente con sus tareas, colaboran “con el crecimiento” del país.
Luego del paro nacional que realizaron los gremios “combativos” alejados de la cúpula de la CGT, el Presidente aseguró: “El trabajo es el camino a seguir en una Argentina en la que dialogamos, construimos puentes y creemos en las relaciones de confianza de largo plazo, apostando a nosotros mismos, a nuestro trabajo y a las ganas que tenemos de progresar y de crecer como sociedad”, aunque no se refirió directamente a la medida de fuerza que este martes llevaron adelante los gremios del Frente Sindical y las CTA. Vidal solo se pronunció a través de Twitter donde posteó: “Con Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta y Nestor Grindetti vinimos al Centro de Monitoreo del SAME en Lanús Oeste para saludar a quienes están de guardia”.
El peronismo, en cambio, convirtió el Día de los Trabajadores en una jornada de protesta con ollas populares. El presidente del Partido Justicialista de la provincia de Buenos Aires, Fernando Gray, manifestó que “cientos de personas no pueden acceder a la canasta básica alimentaria”, al participar de la segunda jornada de marchas y ollas populares, en el marco del 1 de Mayo.
“Quienes tienen la suerte de tener empleo hacen malabares para llegar a fin de mes, por eso estamos trabajando desde todo el campo nacional y popular, con eje en el peronismo, para organizarnos y formar un gran frente electoral”, explicó Gray, al tiempo que lamentó “la falta de atención del gobierno nacional y provincial”.