Ya son varias las veces que el amigo Juan José (Aranguren) se reúne con nuestros representantes en oficinas conocidas, reuniones cada vez más herméticas y sin perjuicio de algunas consideraciones que pienso hacer, está claro que NO se pretenden publicar los motivos, por lo cual entendemos que se trata de un simple “asesoramiento”.
Sobre las consideraciones que entiendo de rigor, tengo que advertir que no somos pocos los participantes del sector GNC que consideramos como poco feliz el tránsito de Juan José por el otrora Ministerio de Energía, paso fugaz que aprovechó para sentenciar de muerte al sector GNC propinando reiteradas veces su opinión sobre lo disfuncional del mismo, apelando algunas veces a la coyuntura del faltante de materia prima para ofrecer este combustible, materializando una dolarización tanto de esta materia prima como así también de la energía eléctrica indispensable para la oferta de nuestro producto. Pero ahí NO termina el daño, sino que se llevó adelante un proceso poco sustentable de ofrecer al mercado interno una mercadería valuada en una moneda distinta, de la misma manera fue dolarizada TODA la cadena de impuestos con los cuales se gravan los precios unitarios y que como todos sabemos, alcanza la friolera de la mitad de cada factura- TODA UNA GENIALIDAD PASIBLE DE UN PREMIO NOBEL.
Digamos que si algún optimista puede ver algo de positivo en esta infeliz intervención es un desarrollo de una fuente no convencional (Vaca Muerta) que se materializo bajo una promesa tan volátil e irresponsable como lo demuestra la posterior e inmediata reformulación compulsiva de los precios de estas producciones de la mano de la limitación de sus volúmenes a los precios definidos por Juan José, esta nueva interpretación surrealista de la famosa resolución 46 es la que intenta Lopetegui a fin de corregir el yerro de nuestro actual asesor Juan José, interpretación que difícilmente termine NO teniendo un correlato judicial adverso.
En definitiva este proceso de transferencia de renta hacia las empresas energéticas, desnuda la aberración de considerar a la Energía como un fin en sí mismo y no como un instrumento para la producción, el trabajo y el bienestar del pueblo, en este camino nuestra industria del GNC fue destruida ante nuestros ojos y los de nuestros representantes sin haber materializado acción alguna para evitarlo, sino peor aún, han convertido al sector en “vocero” de las empresas Petroleras toda vez que propinamos advertencias de seguros atrasos en los precios de los combustibles que ofrecemos y que obedecen a “formulas secretas”, herméticos algoritmos que nadie conoce y que resultan definir el precio de los productos que comercializamos.
Definitivamente el asesoramiento de Juan José, no parecería ser algo que pueda tomarse a la ligera, entiendo que esta contratación sería muy resistida por muchos de nosotros y desde esta tribuna apelamos a cesar con estas actitudes controvertidas y poco funcionales para el sector y en cambio abrir finalmente un debate amplio sobre la problemática real de nuestro sector y la definición de un sendero de reclamos tendientes a la real valorización de la red comercial dentro de este mercado.
AUTOR: Alejandro Di Palma