Nadia Podoroska sigue dando pasos firmes en su crecimiento en el circuito de tenis: este miércoles le ganó a la checa Petra Kvitova, número 9 del ranking mundial, y avanzó a los cuartos de final del Yarra Valley Classic, uno de los certámenes WTA organizados en Melbourne, preparatorio para el Abierto de Australia, el primer Grand Slam de la temporada, que se disputará desde el 8 del actual.
Para la rosarina de 23 años y 47° del ranking mundial, el triunfo ante una doble ganadora de Wimbledon (la checa, ex número 2 del mundo, celebró en el All England en 2011 y 2014), llegó luego de un match de altísima categoría, una extenuante batalla de tres sets y 2h38m de partido: fue por 5-7, 6-1 y 7-6 (9-7). La actuación de la jugadora que en 2020 alcanzó las semifinales de Roland Garros impacta, ya que logró la segunda victoria de su carrera ante una Top Ten. Precisamente en París, el año pasado, fue la primera: contra la ucraniana Elina Svitolina, por entonces 5°, en los cuartos de final.
La próxima rival de la tenista argentina entrenada por Juan Pablo Guzmán y Emiliano Redondi (y preparada físicamente desde hace casi tres años por el equipo que lidera Martiniano Orazi, PF de Diego Schwartzman, en Sports Lab) será la checa Marketa Vondrousova, 21° del ranking y ex 14°, que se impuso en el único enfrentamiento entre ambas, en la primera ronda de Roland Garros 2017. El partido estaba programado para este jueves, pero quedó suspendido (en principio para el viernes), al igual que los otros encuentros, por un estado de alarma en la ciudad después de que surgiera un caso positivo en uno de los hoteles oficiales de los tenistas.
La actuación de Podoroska ante Kvitova sobre la superficie dura del Melbourne Park entra, sin dudas, entre una de las más valiosas y vistosas de su vida. Logró altísimos porcentajes con el servicio: obtuvo el 73% de primeros saques, ganó el 62% de puntos con el primero y el 48% con el segundo, anotó cinco aces, cometió dos doble faltas. Además, le quebró el servicio a la zurda europea en seis oportunidades. En un gran desafío emocional, Nadia mostró temple y equilibrio hasta en los momentos más espinosos. Después de perder el primer set y de ganar, con contundencia, el segundo, Podoroska comenzó el tercer parcial 3-0 arriba, pero Kvitova (que en algún momento acusó problemas en el pie izquierdo, por los que fue atendida por una fisioteraoeuta en un par de oportunidades) se lo igualó. Arribaron al tie-break, la argentina llegó a estar 5-2 abajo, pero tuvo lucidez para darlo vuelta y poder celebrar.
Podoroska empezó 2020 por detrás del puesto 250º del ranking WTA, lejos de las grandes luces. Pero lo terminó dentro del Top 50, la mejor ubicación para una tenista argentina en casi una década, desde Gisela Dulko en julio de 2011 (37°). Y volvió a darle al tenis femenino argentino y sudamericano un espacio largamente esperado.