Soy vecino de la ciudad de Paraná desde que nací, y desde que tengo uso de razón hasta el día de hoy, han pasado más de 40 años y seguimos teniendo los mismos problemas: Agua potable en mal estado o falta de acceso para algunos, cloacas tapadas, falta de alumbrado público, mini basurales, calles intransitables y el interminable paro de colectivos; que en tan sólo 6 meses que lleva el nuevo gobierno ha habido más falta de servicio del transporte público que en toda la gestión anterior.
Hace días que vengo observando los proyectos de Ordenanzas de los concejales de la Municipalidad de Paraná y, sinceramente, rozan lo lamentable ya que, sin lugar a dudas, dejan entrever la falta de conocimiento de las verdaderas necesidades de los vecinos.
Presentan proyectos sin ningún tipo de relevancia y sin aporte de beneficios para los habitantes de la ciudad. Continúan malgastando el tiempo con proyectos de resolución para celebrar una efemérides o para ponerle nombre a una calle, con las complicaciones que implican y generando confusiones en los ciudadanos. Hay 15 Concejales que hasta el momento no han presentado ni un solo proyecto cuya envergadura al menos contemple la posibilidad de generar inversión y mano de obra, sino que por el contrario, se ocupan de crear proyectos para generar más trabas y mayor burocracia en una administración municipal totalmente ineficiente. El caso más reciente es el de los terrenos del Parque Urquiza, cuyo propietario es un vecino de la ciudad. ¿Cómo es posible que no haya un Concejal que esté en contacto con los dueños del predio y comiencen a trabajar en delinear un proyecto en común?, con inversión Público-Privada y que, obviamente, se ajuste a las exigencias municipales. Pero no, mejor es poner palos en la rueda, burocratizar y tirar la pelota para adelante. Por eso estamos como estamos, con proyectos de loteos que hace 3 años duermen y esperan su aprobación, los cuales generarían mano de obra e inversión de manera directa.
Me permito dar ejemplos porque fui parte de la creación de muchos proyectos como la Creación del Área Metropolitana Gran Paraná (Oro Verde, San Benito y Colonia Avellaneda), la Creación de la Guardia Urbana Municipal, la Creación de un Servicio de Emergencias Médicas Municipal, la Recomposición de la totalidad de la rama Vial de la Ciudad, por tan sólo nombrar algunos. Son proyectos que, sin dudas, iban a proporcionar inversión y una mejor calidad de vida a varios miles de habitantes de nuestra Ciudad e, incluso, de las ciudades vecinas.
Nuestra ciudad ha entrado en un proceso de degradación año tras año, gestión tras gestión, y cuando hablamos de degradación no hago referencia simplemente a los servicios, sino también a la infraestructura. Creo que es hora de dar un salto de cualitativo y nuestros funcionarios deben delinear y proyectar de manera urgente una ciudad capital de provincia por lo menos con los servicios básicos cubiertos.