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sábado, abril 27, 2024
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A noventa días de la gestión Bahl

Por: Sergio Fischer, Director

Se cumplen 90 días de la asunción de la gestión de Adan Bahl como Intendente de la ciudad de Paraná.

En los vecinos hay una sensación de que el gobierno no termina de arrancar y ya pasaron tres meses desde aquel diciembre esperanzador.

Es cierto que hay problemas muy complejos heredados, pero no es menos cierto que el diagnóstico de la compleja situación política, administrativa y económica lo tenía la actual administración con mucho tiempo de antelación, al punto de haber manifestado en la larga transición su preocupación.

Ese diagnóstico no parece haber impactado en la toma de decisiones.

A noventa días de la asunción de la administración Bahl, los servicios siguen siendo una problemática a resolver.

Barrios enteros sin agua durante semanas, sin una planificación para atacar la coyuntura que impacta en la salud con la aparición de casos de dengue autóctono y sin atender mediante una fumigación masiva para atacar la problemática y como medida preventiva, sin resolver un problema crónico de la ciudad cómo el estacionamiento, apelando a la Dirección Provincial de Vialidad para resolver (A medias) el estado de las arterias y la recolección de residuos, y sigue la lista.

Hoy, el diario de Paraná publicaba que “La municipalidad de Paraná anunció que reactivará el Fondo de Promoción del Empleo (Fopromem) para adjudicar próximamente entre 11 y 15 microcréditos, de entre 50.000 y 80.000 pesos, con tasa subsidiada y seis meses de gracia. La intención es entregar todos los meses préstamos de este tipo”.

Si bien comparto la visión de que el estado debe promocionar y apoyar a los sectores de la economía social con políticas proactivas, con emergencia declarada y la ausencia de prestación de servicios eficiente, cabe preguntarse si la gestión tiene un norte claro.

Los diagnósticos previos no fueron atacados con los mecanismos que el estado, aún en estas condiciones, tiene.

Ese rumbo, demostrado hasta ahora, presupone una serie de conflictos de corto, mediano y de largo plazo.

Contribuyentes que demandan, empleados sin paritarias, ingresos políticos inexplicables en “Estado de Emergencia”, creación de una mega estructura que, al menos por ahora, parece no interpretar la demanda del territorio.

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