El Gobierno nacional iniciará esta semana una ronda de negociaciones con cámaras empresariales y sindicatos para intentar definir el pago de un bono salarial para el sector privado.
El encargado de las negociaciones será el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, quien hoy convocará a la Unión Industrial Argentina (UIA), a la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Confederación General del Trabajo (CGT).
Sica advirtió que para el Gobierno el tema del bono para los trabajadores del sector privado “no está cerrado”, aunque existe “la voluntad política del Gobierno” para arribar a un acuerdo con empresarios y dirigentes sindicales.
Sostuvo que el objetivo del Gobierno es diagramar cuál es el mejor mecanismo” para recomponer el poder adquisitivo de los trabajadores tras la brusca devaluación que se produjo luego de las PASO de agosto pasado.
El funcionario sostuvo que la idea es, para las próximas horas, reunirse con “la Unión Industrial Argentina (UIA), a las distintas cámaras, a la Confederación General del Trabajo (CGT) y la idea es que lo más rápido posible (se otorgue el bono), para que en octubre los trabajadores puedan tener una compensación”.
Tras la negativa de distintos actores de sectores empresarios a la posibilidad de otorgar un bono de cinco mil pesos a los trabajadores, el funcionario sostuvo, en declaraciones a radio Millenium, que el tema “no está cerrado”.
“Lo que está sí es la voluntad política del Gobierno”, añadió al respecto.
La CAME, entidad nacional que reúne a 1.491 federaciones, cámaras, centros y uniones industriales de todo el país, agrupando a más de 600.000 pymes que emplean a 4.200.000 trabajadores registrados, ya anticipó su negativa a pagar el bono.
En un comunicado, la entidad cuestionó al Gobierno por habilitar un bono y dijo que esa decisión implica destinar dinero que el empresariado del rubro “no tiene” porque atraviesa una situación “angustiante”.
“Sabemos que el dinero no alcanza, pero el problema es que hoy a las pymes tampoco. Estamos en una situación angustiante. Va a ser difícil”, dijo la CAME.
El secretario de prensa de CAME, Pedro Cascales, sostuvo: “Las pymes estamos en una situación de agobio financiero. 5.000 pesos en una pyme típica impacta en unos 100 mil pesos que un empresario no lo tiene”.
En declaraciones a Radio Nacional, recordó: “El bono del año pasado no era obligatorio para las pymes. Se daba a cuentas de futuros aumentos, no era adicional. El impacto no fue tan drástico”.
Por otro lado, consideró: “Hay que ver cuánto de este bono se traslada a consumo. El año pasado se usó para pagar deudas”.
“En CAME ya tenemos pautada la reapertura de paritarias”, destacó el empresario.