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La judicialización de los actos de gobierno cómo única salida al dislate varisquista

La denuncia de Bahl y su equipo ante la justicia puede ser el primer paso mediante el cual pueda establecerse la dimensión del daño causado a la ciudad por el multiprocesado, Sergio Varisco y sus adláteres.

El estado municipal de la capital entrerriana se encuentra en estado terminal.

La advertencia viene siendo oída desde hace tiempo a través de los medios de comunicación.

Los servicios públicos ausentes, infraestructura vial y de saneamiento absolutamente degradada, sus arcas vacías y una dotación de personal totalmente sobredimensionada y altamente politizada, son algunos de los cuestionamientos que se han hecho públicamente a la administración del Intendente Radical de Cambiemos, Sergio Varisco.

No existe antecedente semejante en la ciudad. A poco más de un mes para el cambio de mandato, la ciudad se encuentra atravesada por un verdadero caos institucional que se ha acentuado desde el inicio del proceso judicial por presuntas vinculaciones al narcotráfico del jefe comunal.

Más allá de la presunción que pesa sobre la administración Varisco en relación a la utilización de fondos públicos para facilitar el, también presunto, negocio de narcóticos, la gestión saliente puso los recursos de los paranaenses a entera disposición de sus ambiciones políticas, es evidente.

Entre febrero y agosto de 2019 la gestión de cambiemos en la ciudad incorporó 5,5 empleados nuevos diarios promediando los días hábiles (779 agentes nuevos en 142 días hábiles).

Hoy todavía, meses después de la lluvia de ingresos, siguen apareciendo personas a trabajar “por primera vez” a muchas reparticiones del municipio.

En poco menos de 4 años se incrementó la planta permanente de empleados más del 40%, pasando de 3788 en diciembre de 2015 a 5196 en septiembre de 2019.

De este modo, casi un tercio de la planta actual habrá sido designada por Sergio Varisco para, presuntamente, pagar favores políticos recibidos en campaña electoral. Nuevamente, los ciudadanos y contribuyentes de Paraná, financian las apetencias electorales del cuestionado alcalde capitalino.

Eso no es todo, la cantidad de nombramientos y funciones otorgadas excede lo imaginable.

Para seguir con el festival de designaciones tuvieron que acudir a su imaginación.

El ingenio propició que desde el mes de mayo del corriente año, unos días antes de que se lleven adelante las PASO, la municipalidad creó y designó un Jefe de Sección, un Jefe de Departamento, un Subdirector y un Director de “Baja de Lancha”. ¿Lo llamativo? La municipalidad tiene una sola bajada de lancha sita en Bajada Grande, sin malacate ni servicio alguno. Pero no termina ahí. Hay director de escobería, de cordón cuneta, etc.

Sin embargo, los desmanejos de la gestión del Intendente Radical de Cambiemos han ido más allá de las designaciones y nombramientos.

En concepto de subsidios, los que discrecionalmente han sido otorgados por el ejecutivo, sufrieron un incremento llamativamente significativo en los primeros meses de este año, coincidentemente con el proceso electoral.

La partida de “Asistencia Social Directa” devengada hasta septiembre muestra, hasta la fecha, un incremento del 580% frente a las erogaciones del total del año 2018, pasó de 2,8 millones en 2018 a 19,5 millones en lo que va de 2019.

Semejante desmanejo no ha sido inocuo a las cuentas municipales ni para la sociedad paranaense, víctima de aumentos en los servicios que el municipio dejó de prestar.

A la fecha, el municipio tiene un déficit presupuestario, y luego financiero, solo en la partida destinada a el personal de 850 millones de pesos por lo que no estarían los fondos para pagar los haberes de octubre, noviembre y diciembre, cómo denunció en conferencia de prensa el Intendente electo, Adán Bahl.

Al déficit presupuestario habrá que sumarle el cumulo de demandas por falta de pago a proveedores, el déficit de infraestructura, y el cumplimiento de compromisos asumidos sin las previsiones previstas en el presupuesto.

La denuncia de Bahl y su equipo ante la justicia puede ser el primer paso mediante el cual pueda establecerse la dimensión del daño causado a la ciudad por el multiprocesado, Sergio Varisco, y sus adláteres.

La Capital de la Confederación Argentina, los ciudadanos de Paraná y los entrerrianos en general, debemos insistir para que la “Sarajevo” entrerriana que deja Varisco recupere su valor.

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